Yo en cambio tengo tres trucos, y es seguro que todos funcionan:
1.- Cierra la puerta con la manga de tu jersey, sudadera, camisa o similar, la estiras un poco y ya está.
2.- Empuja la puerta con la pierna o la rodilla, siempre que no vayas en pantalones cortos
3.- Utiliza el mago de la puerta, ya que no es metálico.
Bueno, y un cuarto sería, aunque un pokitín más complicado, que tires del mango interior de la puerta, haciendo un movimiento rápido, y alargando el brazo.